Partimos del supuesto de que en función de los grupos sociales que promuevan el Modelo de Desarrollo, es como se plantean los núcleos fundamentales de las agendas de integración a resolver en los aspectos económicos, políticos, sociales o culturales.
Integrar significa articular intereses y proyectos sobre la base de un objetivo previamente establecido y con la finalidad de trabajar una agenda entre varios Estados. Desde una perspectiva federalista, se entiende que la integración reúne en un nuevo territorio a diversas unidades soberanas y dicho ámbito, es organizado política e institucionalmente para otorgarle competencias propias.
Tal cual lo establece desde su nombre, la integración regional da cuenta de la existencia de una región que incluye un grupo de Estados y de pueblos de América Latina. En el caso latinoamericano las conformaciones nacionales surgen como producto de la disgregación territorial, cultural y política41 de las unidades institucionales coloniales de España y de Portugal: la región en América Latina antecede históricamente a los Estados nacionales. La creación de las divisiones políticas con los nuevos Estados fruto de la disgregación territorial neocolonial42 no desarticuló las coincidencias y puntos en común en la formación histórica, social, cultural y económica del continente. Tal cual estableció Hernández Arregui y por el contario, Iberoamérica reúne las condiciones de una nación integral. Y el falaz nacionalismo de las repúblicas sin existencia propia, auspiciado desde afuera, será sustituido por la conciencia histórica de la nación iberoamericana
Pese a que existen condiciones objetivas que incluyen la potencial articulación cooperativa y solidaria de los intereses regionales, la unidad no se realiza sin la existencia de decisiones políticas que le den contenido concreto. A partir de aquí, es que el tema de la integración regional ingresa y entre otras cuestiones, al debate de la geopolítica nacional, regional y mundial. La categoría GEOPOLÍTICA la entendemos como la disciplina que analiza las relaciones de poder en torno a la geografía (espacio, naturaleza, cultura e historia) con la finalidad de extraer conclusiones sobre el comportamiento político de los Estados y las clases sociales que los conforman.
La especificidad geopolítica de Latinoamérica se centra en nuestra condición dependiente y la historia de la organización de la geografía regional es la de nuestra dependencia política y cultural. La organización del territorio y las disposiciones de los Estados se vincularon estrechamente a que fuimos colonia de España y de Portugal y tras la independencia, aplicamos relaciones neocoloniales en lo económico con Inglaterra o con Francia que indujeron una balcanizaron el territorio. Asimismo, fueron neocoloniales nuestras relaciones culturales con Europa y desde hace décadas, ambas condiciones de subordinación las establecimos con los Estados Unidos44. Las condiciones objetivas de las naciones metropolitanas incluyen en su esfera de actuación a América Latina: el territorio y los recursos del sur forman parte de la esfera de influencia de la geopolítica45 del imperialismo europeo y norteamericano.
Hipótesis 4: los Estados que no aplicaron los Modelos de Desarrollista, Socialista o Nacionalista tienden a promover los programas de integración regional del imperialismo y su caso más emblemático es el Modelo Liberal que balcanizó el continente y que actualmente suscita tratados bilaterales con Estados Unidos o figuras como el ALCA.
Hipótesis 5: Los Modelos Socialista y Nacionalista de izquierda impulsan un tipo de integración regional sobre la base de una agenda que incluye, prioritariamente, la emancipación de los trabajadores y los pequeños productores. Los Nacionalismos Moderado y los Desarrollismos Progresivos impulsan modelos de integración cuya lógica privilegiada pero no excluyente, se relaciona a la expansión de los sectores dinámicos de las burguesías nacionales y de sus empresas públicas, sin descartar las acciones de algunas fracciones de los grupos trasnacionales. El Modelo Liberal impulsa una política de integración subordinada a la valorización de capital trasnacional y pone en funcionamiento la geopolítica norteamericana en el continente.
Hipótesis 6: las propuestas de integración regional del Nacionalismo Moderado, Desarrollista progresivo, Nacionalista de izquierda y Socialista son complementarios y necesarios entre si. Difícilmente se desenvuelva la ALBA sin el polo geopolítico UNASUR- MERCOSUR que está centrado en la hegemonía de Brasil y la Argentina. Ambos Estados deben oficiar como uno de los polos de la unidad regional y como un “núcleo básico de aglutinación” latinoamericana en América del Sur. El Mercosur y sus asociados son así la “base” latinoamericana en América del sur47”. Venezuela y Cuba con el ALBA es otro de los polos de atracción regional de América Latina que se complementa con la UNASUR. El neoliberalismo y el ALCA conducirían a la crisis política, social y económica de la región al aplicar las medidas impulsadas por el imperio norteamericano en el contexto actual de la crisis financiera mundial.
Hipótesis 7: en América Latina coexisten dos grandes tradiciones sobre la posibilidad o la negativa de la integración regional. Por un lado, están aquellas corrientes de pensamiento que recuperan la nación latinoamericana como ámbito histórico y cultural que hay que vertebrar políticamente en una nueva unidad mancomunada (Patria Grande). Por el otro, existen gobiernos que y coincidiendo con la política exterior de EUA, aceleran las diferencias entre los Estados del continente y promueven una alineación geopolítica distante de la integración regional y que está centrada en los beneficios cortoplacistas de las clases dirigentes de cada país con las metrópolis (Patria Chica). Entre los promotores de la Patria Grande se puede mencionar a Brasil, Argentina, Venezuela o a Cuba. Entre los sostenedores de la Patria Chica se pueden nombrar a los gobiernos actuales de Perú o de Colombia.
El debate actual de la integración y los polos UNASUR - ALBA o los tratados de libre comercio, tiene una larga historia en el continente. Arturo Jauretche reconoce la existencia de dos corrientes históricas fundamentales en la historia de las relaciones exteriores de la Argentina y que pueden extrapolarse a América Latina. Por un lado, hace mención a los proyectos políticos caracterizados por la transferencia de recursos y de soberanía al extranjero, cuya condición característica es la de establecer el desmembramiento y la entrega del territorio. Estos grupos en el siglo XIX en las Provincias del Rio de La Plata se denominaron unitarios o liberales y promovieron históricamente lo que Jauretche llama “Patria Chica”. Dicho Modelo Liberal se caracterizó por la promoción y por la implementación de una subordinación política de las decisiones de los países a manos de los imperios extranjeros y los intereses foráneos. En temas de integración implicó el desmembramiento del Virreinato y la promoción de una separación y una rivalidad entre los países de América Latina para estrecharse a Europa. El imperialismo que en el siglo XIX se disfrazó de progreso y civilización, hoy lo hace de neoliberalismo y tratados de libre comercio. El polo político opuesto es lo que Jauretche denomina la política de “Patria Grande” y se refiere a aquellos proyectos de gobierno que desarrollaron unas acciones internas y externas típicas del Nacionalismo cuya finalidad es la defensa del patrimonio material, territorial, social y cultural de los pueblos. En sus palabras: Hemos visto que las grandes líneas de la política argentina corresponden a la oposición entre Patria Grande y Patria Chica. Su opción corresponde en el espíritu castrense a la opción entre ser un ejército o una policía. Con las variaciones de lugar y tiempo, con mayor o menor acierto, con más o menos virtudes o crímenes, las guerras de la independencia, el Partido federal, el Yrigoyenismo y el Movimiento de 1945 y el gobierno que originó, están en la línea de la Patria Grande. Lo demás, excepto el espíritu refugiado en las fuerzas armadas en las ocasiones que se señala y algunos momentos excepcionales de la oligarquía nacional, constituyen al línea de la Patria Chica, cuya euforia se expresa en los vencedores de Caseros y sus restauradores48. En términos de integración, el modelo de la Patria Grande implicó la promoción de la unidad regional Iberoamericana y promovió una concepción de la nación latinoamericana como un ámbito histórico, cultural, social y económico que hay que vertebrar políticamente.
48 Jauretche, Arturo (2008). Ejército y Política, Corregidor, Buenos Aires. P 216.
Según Methol Ferre desde que América latina estableció su independencia se produjeron dos grandes “oleadas” de integración regional. A la primera la ubica en los años 60 y a la segunda en los 90. Como producto de ambas etapas de integración se conformaron cinco núcleos básicos: el NAFTA, el Mercado Común Centroamericano, el CARICOM (Caribe), La Comunidad Andina y el Mercosur. Pero a su vez, estos núcleos básicos pueden reducirse a los más decisivos e importantes dos: Nafta y Mercosur51. A la categorización que hace Ferré, nosotros le sumamos la existencia de la UNASUR y de la ALBA como núcleos fundamentales básicos para la integración.
Alberto Methol Ferré (2009). P 26
Previamente a la organización de instancias concretas de integración regional en Latinoamérica, se fueron generando en el siglo XX acciones y debates que abonaron el camino. La política exterior de los nacionalismos de la década del cincuenta expresaron los puntos más altos en la vocación integracionista
Un caso paradigmático del debate sobre la integración de los años cincuenta, fue el promovido por el peronismo. La política exterior del gobierno de Juan Perón entre los años 1946 y 1955 fue denominada por su conductor como Tercera Posición y se organizó en torno del multilateralismo y de la promoción de la integración latinoamericana. La ruptura con la política exterior pro británica y con el programa de los Estados Unidos, le valió a la Argentina un bloqueo económico e incluyó la participación pública de los norteamericanos en la campaña electoral contra Perón con figuras como el embajador Spruille Braden. En este contexto, el gobierno promovió una apertura hacia las relaciones comerciales y políticas con los países socialistas incluyendo a China, Bulgaria, Rumania, Hungría, Polonia, Checoslovaquia y República Democrática alemana. Muchos de estos vínculos se deterioraron luego del golpe militar del año 1955. La historia de las relaciones con el bloque socialista antes de Perón no había sido fácil e implicó el apoyo de las empresas norteamericanas a la caída del gobierno de Hipólito Yrigoyen, ya que en 1930 el dirigente radical había promovido la nacionalización del petróleo y las negociaciones con compañías soviéticas. La Tercera Posición fue un antecedente importante de los países no alineados y le permitió a la Argentina entablar relaciones multilaterales con las naciones metropolitanas de Europa o Estados Unidos y con el ya mencionado bloque socialista
En los temas ligados a la integración de América Latina el peronismo promovió acciones con los gobiernos y además, lo realizó con los pueblos. La primera tarea se implementó a partir de la firma de convenios comerciales y de cooperación con Perú, con Ecuador, con Paraguay, con Chile, con Uruguay, con Nicaragua y con Bolivia. Perón intentó desarrollar un núcleo básico de aglutinación a partir del Acuerdo entre Brasil, Chile y Argentina denominado como ABC que y finalmente, no prospero y entre otras cuestiones, por las resistencias de los factores de poder dentro del gobierno de Getulio Vargas56. Para integrar a los pueblos el peronismo promovió la Agrupación de Trabajadores Latinoamericanos Sindicalistas (ATLAS) como un medio de acercamiento entre los trabajadores del continente.
El proyecto integracionista del ABC es un antecedente importante del MERCOSUR y lo mismo ocurre con las Agregadurías Obreras de las Embajadas y el ATLAS, que se relacionan estrechamente al espíritu de las políticas implementadas actualmente por la ALBA.
Conclusiones Preliminares
“¿Qué nos ha dejado el capitalismo y la globalización neoliberal?. Después de 300 años de capitalismo el mundo cuenta con 800 millones de hambrientos, ahora, en este momento; 1000 millones de analfabetos; 4000 millones de pobres; 250 millones de niños que trabajan regularmente, 130 millones sin acceso alguno a la educación, 100 millones que viven en la calle, 11 millones menores de 5 años, que mueren cada año por desnutrición, pobreza y enfermedades prevenibles o curables; crecimiento constante de las diferencias entre ricos y pobres, dentro de los países y entre los países; destrucción despiadada y casi irreversible de la naturaleza; despilfarro y agotamiento acelerado de importantes recursos no renovables; contaminación de atmosferas, de los mantos freáticos, de los ríos y los mares; cambios de clima de impredecibles y ya visibles consecuencias. En este último siglo 1000 millones de hectáreas de bosque vírgenes han desaparecido y una superficie similar se ha convertido en desiertos o en tierras degradadas”. Fidel Castro111
111 Fidel Castro (1999). Fidel en Caracas, Oficina de Publicaciones del Consejo de Estado, La Habana, Cuba. P 49
“Seamos libres, y lo demás no importa nada”. José de San Martín
La dinámica del capitalismo de las metrópolis es exportada a América Latina y ello genera un proceso de inestabilidad económica, política y social permanente. La fuga de recursos de la periferia a las metrópolis112, la caída frecuente de los precios de nuestra producción y los patrones de intercambio, el deterioro y el agotamiento del ecosistema, las incesantes crisis humanitarias y sociales y la inestabilidad política de nuestros Estados, son manifestaciones de la tragedia latinoamericana que ya lleva varios siglos.
Actualmente la crisis económica mundial cuyo epicentro son las bolsas y los bancos de Estados Unidos y de Europa, exportaron su inestabilidad al conjunto del planeta y ello implicó un retraimiento de las economías y del comercio en América Latina. En este marco, la integración regional es un espacio a consolidar para revertir los desplazamientos de los precios mundiales y las dificultades de colocación de la producción del continente113. La región está en condiciones de coordinar acciones para garantizar el crecimiento productivo, apoyar la industrialización y el intercambio de trabajo, garantizar el apuntalamiento financiero y promover el desenvolvimiento de la tecnología para todos los gobiernos y los pueblos de América Latina.
La dinámica expansionista norteamericana de los últimos tiempos se vinculó a la apropiación de empresas, de mercados y de los recursos en el continente, mientras promovió la aprobación del ALCA. Derrotada esta propuesta, el imperio impulsó los tratados de libre comercio con cada uno de los países por separado. Su programa expansionista se implementa en torno de operaciones comerciales, políticas y militares como es el caso de la radicación de bases militares, el apoyo a las fuerzas armadas o la intervención en la política interna de los Estados con la supuesta lucha contra las drogas
En este contexto, la UNASUR adquiere una importancia estratégica ya que es uno de los instrumentos institucionales y políticos capaces de hacer un contrapeso geopolítico a las operaciones de las Bases Militares, los enclaves coloniales, la Cuarta Flota o los golpes de Estado del estilo de los promovidos en Bolivia y el ejecutado en Honduras. La historia de las dictaduras del continente o el reciente derrocamiento del presidente hondureño, son expresiones políticas que deben contrarrestar la UNASUR. Brasil y Argentina en este cuadro, son pilares importantes para reforzar la estabilidad regional.
El desafío de superar el subdesarrollo económico y la profunda desigualdad social del continente, es una tarea que implica la necesaria coordinación y la acción simultanea de todos los Estados. La aplicación del medidas como el Fondo de Convergencia Estructural del MERCOSUR pero y especialmente, los programas sociales y solidarios promovidos por la ALBA115, son pasos importantes para saldar la deuda histórica y emancipar a nuestros pueblos de los resultados adversos de la división mundial de las naciones. En este cuadro, Cuba y Venezuela han trazado aspectos fundamentales de una política social coordinada y solidaria de los pueblos y sus gobiernos.
En la última década los diferentes Estados y tal cual vimos, ha adoptado distintos Modelos de Desarrollo que le han permitido en mayor o menor medida, contribuir a saldar las deudas con sus pueblos luego de décadas de políticas liberales y extranjerizantes que destruyeron los países. Pese a las diferencias en la forma, los alcances o en los contenidos de los programas aplicados, todos comparten un punto en común y es que el abandono del neoliberalismo implicó el crecimiento de los productos brutos internos de los Estados y una distribución -aunque aún insuficiente-, más justa de la riqueza nacional
En este contexto, la integración regional es una demanda estratégica ya que y conjuntamente a la solidificación de los Modelos de Desarrollo de cada Estado, son el único camino posible para cercenar la acción expansionista y desestabilizante de los imperialismos. La consolidación de los Modelos nacionales fortalece la integración regional y viceversa: la unidad de los Estados y pueblos debe servir para elevar el nivel de desarrollo de cada uno de los miembros.
Y para cerrar y como dijo Hugo Chávez “La unidad de nuestra América se consolida, cobra fuerza en el concierto de las naciones y levanta su vuelo libertario”. Que así sea
Autor: Aritz Recalde
BIBLIOGRAFÍA
• “ALBA-TCP. Alianza Bolivariana para los Pueblos de nuestra América / Tratado de
Comercio de los Pueblos”, www.alianzabolivariana.org.
• Anuario, estadístico de América Latina y el Caribe (2010). CEPAL. www.cepal.org
• Argumedo, Alcira (1987). Un horizonte sin certezas. América Latina Frente a la Revolución
Científico Técnica, Ed. Puntosur, Buenos Aires.
(1984). Los laberintos de la crisis. América Latina: poder transnacional y
comunicaciones, Ed. Folios Ediciones, Buenos Aires.
• Astesano Eduardo (1982). Historia Social de América, Ed. Peña Lillo, Buenos Aires.
• Basualdo, Eduardo (2006). Estudios de Historia Económica Argentina, Ed. Siglo XXI,
Buenos Aires.
• Calloni, Stella (1999).Operación Cóndor. Los años del lobo. Ed. Peña Lillo, Buenos Aires.
(2009). Evo en la mira. CIA y DEA en Bolivia, Ed. Punto de Encuentro,
Buenos Aires.
• Cardoso F. H. y Enzo Faletto (1996). Dependencia y desarrollo en América Latina, Ed.
Siglo XXI, México.
• Castro Fidel (1999). Fidel en Caracas, Ed. Oficina de Publicaciones del Consejo de Estado,
La Habana, Cuba.
• Chávez, Hugo (2005). Del nacionalismo revolucionario al socialismo, Ed. Madres de Plaza
de Mayo, C.A.B.A.
(2009). El alba y la hora de los hornos. www.gobiernoenlinea.ve
• Comunicado conjunto de los presidentes de los estados partes del Mercosur.
http://www.mercosur.org.uy/
• Correa Rafael (2010). Discurso en la cumbre presidencial y de autoridades indígenas y
afrodescendientes de la ALBA, Otavalo, 25 de junio de 2010. www.presidencia.gov.ec
• Debray, Regis (1975). La crítica de las Armas, Ed. Siglo XXI, Madrid.
• Ellner, Steve (2009). “Las reformas neoliberales y la crisis política venezolana, 1989 –
1999: antecedentes de la llegada de Hugo Chávez al poder”, en Diez Años de Revolución
en Venezuela: historia, balance y perspectivas, Ed. Maipue, Buenos Aires.
• Espasande Mara (2009). Desafíos de América Latina en el Siglo XXI. La crisis mundial: ¿el
fin de un sistema?. Ed. Universidad Popular Madres de Plaza de Mayo, C.A.B.A.
• Estudio económico de América Latina y el Caribe 2009-2010 (2009). CEPAL.
www.cepal.org
• Fernández de Kirchner Cristina (2010). Discurso de la Presidenta por el Día de la
Independencia, 9 de julio, Tucumán. www.casarosada.gov.ar
• Ferre Methol (1973). Geopolítica de la Cuenca del Plata, Ed. Peña Lillo., Buenos
Aires.
(2009). Los Estados Continentales y el Mercosur, Ed. Instituto Superior
Arturo Jauretche, Buenos Aires.
(1959). La crisis del Uruguay y el imperio Británico, Ed. Peña Lillo, buenos
Aires.
• Frondizi, Arturo (1983). El Movimiento Nacional, Ed. Paidós, Buenos Aires.
• Furtado Celso (1971). El poder económico: Estado Unidos y América Latina, ED. Centro
Editor de América Latina, Buenos Aires.
• Galeano Eduardo (1974). Las Venas Abiertas de América Latina, Ed. Siglo XXI, México.
• García Guardilla María Pilar (2009). “La praxis de los consejos comunales en Venezuela:
¿poder popular o instancia clientelar?”. en Diez Años de Revolución en Venezuela:
historia, balance y perspectivas, Ed. Maipue, Buenos Aires.
• García Linera (2008 - b). La potencia plebeya, Ed. CLACSO, Ed. Prometeo, Buenos Aires.
(2008). Solemne Instalación del periodo ordinario de sesiones de la
Legislatura 2008-200, La Paz, 22 de enero de 2008. www.vicepresidencia.gob.bo
• Galasso, Norberto (1983). Felipe Varela y la Lucha por la Unión Latinoamericana, Ed. Del
Pensamiento Nacional, Buenos Aires.
(2005). Perón, ascenso y caída (1893-1955), Ed. Colihue, Buenos
Aires.
34
(2007). Seamos Libres y lo demás no importa nada. Vida de San
Martín, Ed. Colihue, Buenos Aires.
• Gunder, Frank, A. (1970). Capitalismo y Subdesarrollo en América Latina, Ed. Signos,
Buenos Aires.
• Guerrero Modesto E. (2007). ¿Quién invento a Chávez?, Ediciones B, Buenos Aires.
(2009). Venezuela 10 años después, Ed. Herramienta, Buenos Aires.
• Gugliarmelli, Juan Enrique (2007). “Función de las fuerzas en la actual etapa del proceso
histórico argentino”, Estrategia, No 1, mayo – junio de 1969. En Pensar Con Estrategia,
UNLA, Buenos Aires.
(2007 – b). “Fuerzas armadas para la Liberación
Nacional”, Estrategia, No 23, julio – agosto de 1973. En Pensar Con Estrategia, Ed. UNLA, Buenos
Aires.
• Halperin Donghi Tulio (1981). Historia contemporánea de América Latina, Ed. Alianza
Editorial, México.
• Hernández Arregui, Juan José (2002). ¿Qué es el Ser Nacional?, Ed. Catálogos y
Secretaría de Cultura de La Nación.
(1972). Peronismo y Socialismo, Ed. Hachea, Bs. As.
(2004). La Formación de la Conciencia Nacional, Peña Lillo,
Buenos Aires.
• Informe de Gestión (2009). Ministerio de Planificaron Federal, Inversión Pública y
Servicios, Argentina.
• Inclusión y previsión social en una Argentina responsable (2001). Ed. Presidencia de la
Nación Argentina - ANSES. Buenos Aires.
• Iñiguez Piñeiro, Carlos (2006). Pensadores Latinoamericanos del siglo XX. Ed. Siglo
XXI, Buenos Aires.
• Jaguaribe, Helio (1961). Burguesía y proletariado en el nacionalismo brasileño, Ed.
Coyoacán, Buenos Aires.
(1973). Desarrollo económico y político, Ed. Fondo de Cultura
Económica, México.
(2006). “Una Alianza Argentino – Brasileña”, en Hacia la integración de
América Latina y el Caribe, Ed. Copppal, C.A.B.A.
(1972). Crisis y alternativas de América latina: reforma o revolución, Ed.
Paidos, Buenos Aires.
• Jauretche, Arturo (2008). Ejército y Política, Ed. Corregidor, Buenos Aires.
• Las Misiones Bolivarianas (2006). Ed. Ministerio de Comunicación e Información, Caracas,
Venezuela.
• Laclau Ernesto (2005). La razón populista, Ed. Fondo de Cultura Económica, Buenos
Aires.
• Lander Edgardo y Pablo Navarrete (2009). “La política económica de la izquierda
latinoamericana en el gobierno: el caso de la República Bolivariana de Venezuela (1996-
2006)”, en Diez Años de Revolución en Venezuela: historia, balance y perspectivas, Ed.
Maipue, Buenos Aires.
• Lenin V. I. (2000). El Estado y la Revolución, Ed. Siglo Veintidós, Buenos Aires.
• López Maya Margarita (2009). “El movimiento bolivariano: ascenso al poder y gobierno
hasta 2008”, en Diez Años de Revolución en Venezuela: historia, balance y perspectivas,
Ed. Maipue, Buenos Aires.
• Mansilla, Diego (2008). Petroleras Estatales en América Latina: entre la
transnacionalización y la integración. Revista del CCC [en línea]. Enero / Abril, n° 2.
• Manuel Práctico del Segundo Plan Quinquenal (1953). Ed. Subsecretaría de
Informaciones. Presidencia de la Nación Argentina.
• Mariátegui, José C. (2005). Siete ensayos de interpretación de la realidad peruana, Ed. El
Andariego, Buenos Aires.
• Miceli Felisa (2006). “La Integración Económica y Social en el MERCOSUR”, en La
dimensión Social del MERCOSUR, Reunión de Ministros y autoridades de Desarrollo
35
Social del MERCOSUR, Ed. Consejo Nacional de Coordinación de políticas Sociales,
Presidencia de la Nación Argentina. www.mercosur-social.org
• Mosconi, Enrique (1983). El petróleo argentino. Ed. Círculo militar, Buenos Aires.
• Plan Trienal Para la reconstrucción y la liberación nacional (2006). República Argentina,
Poder Ejecutivo Nacional, diciembre de 1973. En “Perón, Obras Completas”. Ed. Docencia,
Buenos Aires.
• Perón Juan Domingo (1968). La Hora de los Pueblos, Ed. Norte, Buenos Aires.
• Podetti Humberto (2006). “La comunidad sudamericana del agua y la energía como
respuesta a la crisis global”, en Hacia la integración de América Latina y el Caribe, Ed.
Copppal, C.A.B.A.
• Prieto Alberto Rozos (2007). Las guerrillas contemporáneas en América Latina, Ed. Ocean
Sur, Colombia.
• Puiggrós, Rodolfo (1965). Integración de América Latina, factores ideológicos y políticos,
Jorge Álvarez Editor, Buenos Aires.
• Quintero Pablo y Mario Ayala (compiladores) (2009). Diez Años de Revolución en
Venezuela: historia, balance y perspectivas, Ed. Maipue, Buenos Aires.
• Ramos Abelardo (1973). Historia de la Nación Latinoamericana, Ed. Peña Lillo, Buenos
Aires.
• Recalde Aritz (2005). El Sistema Político Cubano, Democracia
y derecho a su
Autodeterminación. www.scribd.com/doc/23615846/El-sistema-politico-cubano
(2009) Modelos de Desarrollo en Argentina, Ed. CEHA, Bs. As.
(2008). ¿Qué es el pensamiento nacional?, Ed. CEHA, Bs. As.
(2010 - b). La Constitución de Venezuela: del nacionalismo revolucionario al
socialismo,
Ed. CEHA, Buenos Aires.
(2010 – c). Apuntes para una sociología de la cultura, Ed. CEHA, Bs As.
(2010 – d). Indigenismo y soberanía en la Constitución de Bolivia, Ed. CEHA, Bs.
As.
• Retamar Fernández Roberto (2006). Pensamiento de nuestra América, Ed. CLACSO,
Buenos Aires.
• Roitman Roberto (2010). “La política exterior de Juan Domingo Perón”, en Unir lo diverso.
Problemas y desafíos de la integración latinoamericana, Ed. UNCUYO, Mendoza.
• Sader Emir (2010). ¡Viva nuestra política exterior, soberana e independiente!.
www.rebelion.org
(2010 - b). Otro mundo es posible. www.rebelion.org
• Samir, Amin (2005). Más allá del capitalismo senil. Por un siglo XXI no norteamericano, Ed.
Paidós, Buenos Aires.
• Siepe R., Monserrat Llairo y N. Gale (1994). Perón y las relaciones Económicas con el
Este, Ed. Centro Editor de América Latina, Buenos Aires.
• Taiana Jorge (2006). “La integración latinoamericana y caribeña”, en Hacia la integración
de América Latina y el Caribe, Ed. Copppal, C.A.B.A.
• Torrijos, Omar (1973). La Batalla de Panamá, Ed. EUDEBA, Buenos Aires.
• Trias Vivian (1974). La guerra del petróleo y la crisis económica mundial, Ed. Crisis,
Buenos Aires.
(1973). Imperialismo y geopolítica en América Latina, Ed. Cimarrón, Bs. As.
• Ugarte, Manuel, (1996). La Patria Grande y Otros Textos, Ed. Teoría, Buenos Aires.
• Urriza Manuel (1983). América Latina ¿Hacia qué democracia?, Ed. CIDAL, Buenos Aires.
• Varsavsky, Oscar (1971). Proyectos Nacionales, Ed. Periferia, Buenos Aires.
• Velasco Alvarado, Juan (1973). La Revolución Peruana, EUDEBA, Buenos Aires.
Paginas Mencionadas
www.alianzabolivariana.org
www.mercosur.org.uy
www.alianzabolivariana.org
www.vicepresidencia.gob.bo
Anónimo "Integración Regional de América Latina" [en linea]
Dirección URL: https://www.zonaeconomica.com/america-latina/integracion-regional (Consultado el 03 de Dic de 2024)